sábado, 8 de agosto de 2009

UN SOL PARA LOS NIÑOS

Aprovechando la cercanía de la fecha en que se celebra el día del infante en Argentina, y haciendo uso de mi excesiva (e inútil) capacidad de divagar, me gustaría decir que esta historia de que el shampoo Johnson es el único que evita las lágrimas es una gran mentira. Por experiencia propia puedo asegurar que, si se te cae una gota de shampoo Johnson adentro de uno de los ojos, te quedás tan momentáneamente tuerta como si padecieras el mismo accidente con un producto de cualquier otra marca.

4 comentarios:

Leticia Chopi Sofiro dijo...

jajajajajaja, no importa, es psicol+ogico el asunto de las lágrimas....................

Adriana Rearte dijo...

Igual, todos los asuntos son psico-logicos, no ??

Adriana Rearte dijo...

A ver, lo de Psicol-OGICO lo tendria que explicar Chopi. Para mi viene siendo mas bien tan psico como logico, comprendés..??

Adriana Rearte dijo...

Mmhhmmm...Perdon por la digresion pero las lagrimas que te produce el shampoo no implican ningun tipo de llanto...Tiene su logica, no ?