Presentaciones. Empecemos por los ultra-participativos, los que pasan siempre, los que no se pierden una, los que se involucran, los que protestan, los que aceptan el intercambio y esperan la réplica.
Haciendo punta en el pelotón asoman María, Matías y Ann. De María elegimos (un poco a la fuerza) no pasar demasiadas informaciones, ella se inclina por los perfiles bajos (Carlos es enano). Estudió derecho, trabaja en un estudio de la capital de España y está tratando de (terminar de) redactar su tesis de doctorado. Vive en Madrid. Club de amigos por correspondencia; con María nos empezamos a escribir cuando teníamos 17 o 18 años; nos vimos solamente 4 veces; compartimos una conexión cósmica.
Pasemos a Ann. Ann es una antigua compañera de colegio. Nunca nos registramos demasiado. No pertenecíamos a la misma banda (bah, yo, en realidad, no pertenecía a ninguna banda, aunque me hubiera gustado hacerlo…). Hace un par de meses nos reencontramos en Facebook y retomamos el contacto. Actualizaciones e intercambio de novedades vía Internet. Ann es la mujer de Mariano, y la mamá de Lole (personaje conocido, y muy pero muy querido en este medio). Mes de Marzo; Viole empieza el jardín de infantes en el Pestalozzi; salita de dos. Después de una semana de adaptación -que incluye pataleadas, llantos y mordidas- Lole empieza a disfrutar de su escuela. Crece y aprende, y disfruta. Yo nunca terminé de adaptarme al mundo, sigo a las pataleadas y a los llantos; Ann es, actualmente, una de las pocas personas con las que tengo un canal comunicacional. Thank you for that.
Matías (el tercero de los que vienen haciendo punta) también acaba de empezar su año escolar. A él ya no le ponen color al nombre de la salita porque es un grown up. Empezó lo que (creemos –y esperamos) va a convertirse en su último año de facultad así que, si todo sale según lo hemos planificado, a fines del 2008 tendremos a un licenciado Pessacg dando vueltas por la ciudad. Con Matías nos conocimos en un curso del CUI; nos reconocimos unos meses después y ya no nos desconocimos más. Viene de La Pampa; trabaja y estudia, y sigue yendo al CUI para mejorar su nivel de inglés. Vive con sus hermanos; es el yerno querido y aclamado por toda (potencial) suegra.
Hoy tenía ganas de hablar de los que me hacen compañía todos los días; ellos tienen un doble de llaves; empujan la puerta y entran.
Hay otra gente que se acerca, algunos pasan por la entrada y miran el timbre (pero no lo tocan); otros suenan de vez en cuando; otros escriben una notita y la pasan por debajo de la puerta, otros caen inesperadamente desde distintos lugares (y siempre me queda la duda de saber cómo consiguieron la dirección…). Algunos vuelven, algunos no.
Gaby, Elvi, Gaël, Ale Girard, Margarito, Marguerite, Marie, Chopi, la Cronopia, Marisa, Ana María, Inés, Kama, Kostas… ¿alguno más? Hay una cajita azul abajo del ventanal. Abran la cajita y agarren la llave; vuelvan a entrar; pasen, vayan, vengan…Siempre queda alguno haciendo guardia en el lugar.